***Hermandad entre capricultores, intercambio genético y siembra de material local para el consumo animal forman parte de las experiencias exitosas del sector
(Caracas, 19-03-17/Prensa Minppapt).- Durante la transmisión número 40 del programa Cultivando Patria, efectuado desde el Aprisco “Los Isleños”, ubicado en el municipio Zamora, estado Lara, el ministro del Poder Popular para la Agricultura Productiva y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, en compañía de productores caprinos de la entidad resaltaron las bondades de la producción de estos pequeños rumiantes en cuanto a rendimiento, producción y mantenimiento.
En este sentido, el titular de la cartera agrícola, sin ánimos de menospreciar la calidad y el esfuerzo del sector bovino, realizó un balance de sustentabilidad entre estos dos rubros exaltando a favor del caprino el número de crías, gestación, producción de leche, autonomía y cantidad en el consumo de alimentos propios de la región.
“10 cabritas dan un promedio de 20 litros (Lts) diarios y entre todas consumen 45 kilos (Kg) de comida, además pueden dar 15 animales al año y con 5 litros de leche se elabora 1 kg de queso; mientras que una vaca extraordinaria produce la misma cantidad de leche, consume la misma cantidad de alimento, sólo da una cría al año y se necesitan alrededor de 8 litros de leche para producir la misma cantidad de queso”, detalló el Castro Soteldo.
Es por ello, que invitó a evaluar los niveles de rendimiento del sector de pequeños rumiantes, para continuar el impulso del aparato agroalimentario y agropecuario del país, asimismo, con estas comparaciones apuntó “si se muere la vaca se acaba la producción, mientras que si se muere una cabrita le quedan 9 en producción”.
Experiencias capricultoras
Raúl Antonosi, productor de “Los Isleños”, manifestó que desde dicho centro de reproducción cuentan con rebaños de raza Anglo Nubia, que resultan del cruce de Jamnapari de la India y sementales del tipo Zarabi de Egipto “en Venezuela no existían. Estos rebaños poseen una gran ventaja en el área de producción lechera, pues el contenido de grasa es alta, resultando ser excelente para la elaboración de quesos”.
Esta raza produce alrededor de 700 litros por lactancia y cuenta con un porcentaje de grasa que va de 4 a 4,5 %. No obstante, dentro del Aprisco que funge como centro genético para la expansión de caprinos hacia otros productores de la zona, amplía sus horizontes hacia el sector cárnico, es decir hacia la ganadería doble propósito.
Francisco Sulbarán, encargado del Aprisco resaltó que en dicha unidad de producción también se impulsa el proyecto de siembra de cultivos autóctonos de la zona que pueden ser aprovechables para la suplementación animal con miras a la autosustentabilidad para no depender de la industria.
Por su parte, Jesús Arispe, cuenta con 5 años de experiencia en el sector 3.3 hectáreas y 300 animales, indicó que en alianza con los demás capricultores se busca producir de manera local el alimento impulsando la siembra de maíz, pasto de corte, moringa, morera, cuba 22 y titonia.
Estas experiencias también contribuyen al desarrollo económico y social de las familias larenses, así lo manifestó Rafael Bastidas quien posee una empresa familiar donde se explota la ganadería caprina en pequeñas cantidades de tierra y usan recursos propios de la granja para mantenerla “entre los cabreros existe una conexión e intercambio, los isleños nos ha servido de centro genético”.
Finalmente, Luis Ferrer, productor caprino de Sabana Grande, en la entidad larense, exaltó que cada productor debe amar lo que hace, sentirlo y reflejarlo desde la entrañas todo se puede con trabajo, esfuerzo y perseverancia; es por ellos que el levantamiento de su rebaño en gran parte se debe a la materia prima nacional. (Fin/EM)